En Metalúrgica Duroll siempre priorizamos la salud y seguridad de nuestros usuarios. Por ello, en esta nota plantearemos la importancia de repasar los riesgos inherentes de trabajar y manipular cemento en forma permanente.
Primero debemos decir que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) reconoce a este conjunto de dolencias como enfermedades profesionales. Esto incluye todas las afecciones relacionadas al sistema respiratorio, osteomuscular, de la piel, etc. causadas por agentes químicos vinculados al cemento.
Podemos decir que el cemento es el elemento más utilizado en el mercado de la construcción. Es un material que se presenta en estado sólido (en polvo) y es utilizado como aglomerante para la elaboración del concreto o mortero. Los componentes químicos principales del cemento son los siguientes: Silicato tricálcico (3CaO.SiO2), Aluminato tricálcico (3CaO.Al2O3) y Magnesio libre (MgO). Estos componentes en combinación con otros al dar contacto o ingresar en el cuerpo humano, pueden producir distintas enfermedades o dolencias que afecten la salud de los operarios.
Respecto las lesiones que el cemento puede generar en el sistema respiratorio, acotamos que pueden originarse cuando el operario abre y vacía la bolsa de cemento para comenzar a preparar la mezcla. También se pueden generar problemas cuando se corta, taladra o demuele concreto, ya que el mismo polvo que se forma posee partículas pequeñas de cemento.
Entre las afecciones generadas en el sistema respiratorio por el cemento podemos enumerar la Silicosis: enfermedad por inhalar polvo de sílice, la Bronquitis aguda: inflamación de las vías que llevan aire a los pulmones y la Bronquitis industrial: inflamación de las vías respiratorias de personas expuestas a polvos y ácidos fuertes.
También debemos destacar la posible generación de problemas digestivos a través de la exposición prolongada al polvo de cemento con, por ejemplo, úlceras gastrointestinales. A su vez, el contacto del polvo de cemento con los ojos, puede provocar lesiones graves, de carácter potencialmente irreversibles. Por último, diremos que el contacto de forma prolongada de las partículas de cemento, puede ocasionar infecciones en la piel (forunculosis, abscesos, panadizos, etc). La dolencia de la piel más común generada por los compuestos del cemento, es la dermatosis, ocasionada por la acción irritante de sus mismas sustancias químicas.
¿Cómo podemos prevenir las lesiones producidas por el cemento?
Es fundamental tomar las medidas de prevención adecuadas. Es indispensable cumplir con las normas y regulaciones del trabajo: máscaras, guantes, casco, ropa de trabajo, botas y el respeto de las condiciones higiénicas del ambiente. Cumpliendo con las regulaciones legales vigentes, podremos estar seguros de poder evitar estas consecuencias sumamente indeseables de la manipulación del cemento. También tener en cuenta, que las cabinas de las excavadoras deberán ser cerradas y poseer un suministro de aire seguro.